30ª Patitrobada, jugando con los artistas

 Si habéis seguido el blog estos días ya habréis podido ver cual era mi planning para el pasado fin de semana, pues al final decidimos variarlo un poco, el motivo fue que inicialmente a Anna le tocaba trabajar todo el sábado, y Candi y yo íbamos a ir a pasar el día a las 24h de Sabadell, pero finalmente Anna tenía fiesta por la tarde, así que aplazamos nuestra marcha para poder salir a jugar los tres. Como hacia un sol radiante, los pajarillos cantaban y las muchachas se paseaban por las calles alegrando la vista de los transeúntes... MENTIRA ! hacía un día de mierda y como no me iba a quedar en casa aburrido y solo cogí el coche y para Igualada a la Patitrobada!

 Vaya si hice una buenísima elección, que no erección, pues allí había grandes personajes como el señor Perepau Llistosella (kokrin) y Viktor Bautista, ambos dos creadores de juegos españoles, el primero conocido por juegos como Sidibaba y una de sus próximos juegos que se editará será 21 Motines, el otro tal vez lo conozcáis por ser el pensador que está detrás del juego Nonaga.

Viktor, Ribouldingue y Kokorin juntos

Tampoco llegue demasiado pronto, tenía un par de horitas para disfrutar de la compañía de estos genios, así que Viktor no tardo demasiado en ponernos a jugar a mi i a Perepau a una de sus ultimas creaciones, creo que todavía no tiene un nombre definitivo pero por llamarlo de alguna manera será "el nido". Un juego de reglas extremadamente sencillas y sobretodo para todas las edades, el juego es de habilidad y algo de memoria también. 

El juego consiste en un grupo de bastoncillos con las puntas coloreadas, estos bastoncillos se introducen en un recipiente como un vaso y los jugadores los van extrayendo uno a uno y colocándolos de manera que se aguanten encima del recipiente, si alguien consigue un bastoncillo que tenga los dos extremos del mismo color entonces tiene la posibilidad de intentar poner un huevo, los huevos están representados por unas bolas, así que la gracia está en conseguir colocar una de estas encima del entramado de bastoncillos sin que se caiga, gana la partida el jugador que consigue deshacerse de todos sus huevos. Hay algunas cosillas más por ahí como las penalizaciones o cuantos bastoncillos hay, etc. pero ya os podéis hacer una idea general, la verdad que el juego esta entretenido y seguro que lo podríais sacar a la mesa con vuestra tía Paqui en navidad cuando ya lleva unas copitas encima, seguro que seria la monda.

Viktor intentando poner un huevo

 Tras la partida al nido le propuse a Kokorin probar uno de sus prototipos, Admunsen vs Scoot 1911, un juego de cartas para dos. A este jugamos un par de partidas, la primera prácticamente ni os la cuento porque perdí estrepitosamente, como Scoot existe la posibilidad de morir y como soy así de afortunado la palmé a la primera de cambio, así que le propuse la revancha. El juego se basa en la gestión de tu mano, debes controlar las cartas que se lleva el oponente y a su vez controlar las cartas disponibles para los próximos turnos, muy rapidito y sencillo. Básicamente las cartas están coloreadas y cada jugador debe llegar con su peón al polo sur, para avanzar por las casillas del tablero hay que jugar una carta del mismo color al de la casilla siguiente a la que nos vamos a desplazar, si no queremos jugar cartas siempre podemos robar o descartarnos. El juego esta muy bien aunque le faltan pulir algunos detalles, hay cartas especiales y comodines que le dan vidilla al juego, y como tienes que estar pendiente de lo que roba el otro y de lo se puede robar tiene un punto de interacción indirecto. La segunda partida que jugamos conseguí ganarla a puras penas, eso si nos metimos unas buenas risas durante el transcurro del juego.

Admunsen vs Scoot, foto reutilizada!

 Finalmente Kokorin sacó el plato fuerte del día, un nuevisisisismo prototipo, "Dinamita cartas"(el tio solo lo había testeado una vez la noche anterior y me parece que solo), nos sentamos alrededor de la mesa Ribouldingue, Viktor, Arekku de la tienda daruma que acababa de llegar y yo para empezar la partida. Solo os diré que el juego es muy divertido, a mi me transmitió las mismas sensaciones que la primera vez que jugué al The Island, sensaciones de querer putear al otro pero a su vez queriendo puntuar uno mismo, el juego no tiene nada que ver con este último pero la diversión que me genero digamos que es parecida a este. Próximamente haré una mini reseña del juego con las fotos que hice por allí por qué me parece que merece la pena hablar de él y que todos lo conozcáis. En esta partida hicimos un coitus interrumpus porque debía largarme para casa, era la hora de comer y había que prepararse para lo que venia por la tarde, las 24h de Sabadell.

En plena explicación del "Dinamita cartas"