¿ Jugamos con los niños ? Dijeron los mayores…

La pasada noche de navidad, después de la cena y de los respectivos regalos, decidí amenizar la noche con uno de esos juegos raros que tengo yo según dicen ellos. Empezamos la noche estrenando el Set, juego que me había auto regalado de tal manera que nadie pudiese sospechar de ello, escribiendo mi nombre en el paquete con una caligrafía muy diferente a la mía y lo más importante, sorprendiéndome mucho a la hora de abrirlo, soy un gran actor… 

Como os digo la noche empezó con una partida al Set, un juego interesante en el que pueden jugar un gran número de personas ya que lo único que deben de hacer es reunirse alrededor de la mesa, ya hare una reseña del juego para daros mis impresiones. Respecto a la partida, prefiero no comentar nada, mi hermano nos dio la mayor paliza jamás vivida en un juego de mesa, es increíble que con lo tonto que es pueda ver los sets tan rápidamente, jeje.

Después de un unas tres partidas al Set y de perderlas todas por aplastante victoria de mi hermano… decidí sacar un juego ya conocido por todos y también recientemente adquirido: Coloretto. Este juego es una de las estrellas entre mis abuelos, lo entendieron muy rápido la primera vez que se lo explique y siempre hacen muy buena puntuación. Esta vez, la partida se decantó hacia el hermano pequeño, vamos, que gane yo. Mi abuelo jugando con una estrategia muy arriesgada de esperar siempre a ver que cartas dejan los demás encima de la mesa consiguió una magnifica escalera de color de todos los camaleones posibles habidos y por haber, mi abuela quedo segunda con a pocos puntos de distancia míos, mi hermano hizo una gran actuación y quedo ultimo con unos bochornosos 14 puntos siguiendo a mi pareja que quedo también segunda, pero por la cola.

Pero la noche no termino aquí, todavía nos queda el plató fuerte y estrella triunfante, os hablo del King of Tokio. Es gracioso ver a personas que rondan los 70 años jugando a ser monstruos gigantescos que quieren apoderarse de la ciudad de Tokio, y más gracioso es que los dos de mayor edad sean quienes se disputen la victoria en la última tirada. Pues si amigos, en este juego ganó mi abuela tras aniquilarnos a demás. La partida empezó con mi hermano y mi abuela dentro de Tokio atacando a diestro y siniestro a los que estábamos afuera, Anna no tardo demasiado en ser eliminada 

Mi abuela, hermano, abuelo y yo jugando a King of Tokio

Continuamos jugando sin hacer mucho caso en conseguir energía ni puntos de victoria pero si regalando mamporros para todos para ver quién era el siguiente en caer. La cosa estaba igualada, ya que constantemente el dominio de Tokio era cedido y los turnos iban pasando y solo conseguíamos acumular puntos de victoria pero sin debilitar mucho a los rivales, hasta que un par de rondas con unas tiradas bastante desastrosas propiciaron la eliminación de mi hermano y seguidamente la mía.

"Esto es más divertido que el Bingo"

¡ Tu serás el siguiente !

La batalla final estaba entre dos grandes adversarios, llovían ostias por ambas partes y se cedían Tokio constantemente, la partida parecía que iba a terminar con la victoria de mi abuelo a base de puntos, solo le faltaban 4 puntos para la victoria y parecía tener todo a su favor, pero una vez más después de recibir un ataque por parte de mi abuela y quedarse a poca vida, intento un ataque a la desesperada viendo que en sus primeras tiradas no conseguía ningún corazón para curarse, desgraciadamente no tuvo la suerte necesaria para acabar con su enemigo pero si para dejarlo bastante malherido y confiando en tener otra oportunidad para terminar con él en el siguiente turno, que como todos imagináis, nunca tuvo lugar, ya que en el siguiente ataque mi abuela le metió tal somanta de palos que el monstruo de mi abuelo no va a querer volver a salir de la caja en mucho tiempo.